20 de setembre 2010

Eso dicen Carney


Dicen, dicen,
pero tú no dices nada.
De tanto callar,
tú ya no dices nada.
De tanto callar (Deluxe)


Dicen que ahora aprende sexo tántrico, en el bolso siempre lleva libros de sexualidad sagrada para cualquier tiempo muerto e intenta hacer prácticas aprovechando el traqueteo del tren. Ha pensado en redecorar su vida y ha empezado por tirarlo todo, pintar la habitación de blanco nuclear y fumigar el sofá que le llegó con la herencia. Además parece que se ha dado a las drogas desde que se bebe un vasito de vino blanco mientras cocina y se ha enganchado a la regaliz superando la dosis diaria recomendada. Total, ¿todo esto para qué? Si en realidad su vida tiene los días contados, no más de cuatro meses con sus días y sus horas. Ha vuelto a hacer deporte en equipo siendo ella la única nacional y como todo con altos y bajos. Ha pensado que todo esto serviría para rebobinar y volver a aquel punto en el que dejó su vida a la deriva fluyendo bajo influencia alguna de sus deseos, pero su cuerpo le recuerda que ya no es la misma. Carney, ahora tiene agujetas por nada, se le cierran los ojos antes de las doce y con la salida del sol ya los tiene abiertos, no puede girar el cuello sin sentirlo apunto de romper, las canas le van asomando entre esos rizos que ya no son melena y tiene miedo que en cualquier momento le sobrevenga un deseo animal de tener descendencia. Tranquila Carney, quizás solo sean habladurías y esto no te esté pasando a ti.


3 comentaris:

  1. Bo, molt bo!
    Manel Queralt

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  2. "...dicen que sonríes en la soledad, y que de noche hablas a escondidas, que cantas y bailas con los espejos, esperando alguna respuesta dle tiempo..."

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  3. Moltes gràcies Manel!

    Señor de la Suburbia... dicen que hay un ángel a los pies de tu cama que siempre vela por tu suerte, pero tú sólo ves la vela al final del camino y la llama en tu lecho de muerte...

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