Ayer vi mi futuro, lo pude tocar, sentir, mirar, e incluso, fotografiar.
Sé que este futuro no tardará en llegar a mi, a lo sumo los días que tiene mi mano.
La mayor parte de él me hace sentir cómoda, amplia y con aire fresco para respirar. Una pequeña parte es minúscula, donde se amontonan las cosas. Espero que en todo él reine el orden, donde cada cosa tiene su sitio.
Ayer fue un cúmulo de sentimientos, era como entrar en el decorado de una película y pudieras comprobar que nada era de cartón piedra. En aquel momento no lo pensé, pero ahora pasa por mi cabeza que no quiero que nada de lo que vi en la película pase en mi vida. Al principio abrí la puerta y me dio la sensación que un mundo empezaba en aquel minúsculo túnel. La pobre Catalina empezó a llorar de la emoción, volvía a su pasado, el que ahora sería su presente y futuro. Un quebranto a la derecha y otro a la izquierda y qué bonito era ver esas tablas de madera y ese terrazo a modo de escalera. [...]
Sé que este futuro no tardará en llegar a mi, a lo sumo los días que tiene mi mano.
La mayor parte de él me hace sentir cómoda, amplia y con aire fresco para respirar. Una pequeña parte es minúscula, donde se amontonan las cosas. Espero que en todo él reine el orden, donde cada cosa tiene su sitio.
Ayer fue un cúmulo de sentimientos, era como entrar en el decorado de una película y pudieras comprobar que nada era de cartón piedra. En aquel momento no lo pensé, pero ahora pasa por mi cabeza que no quiero que nada de lo que vi en la película pase en mi vida. Al principio abrí la puerta y me dio la sensación que un mundo empezaba en aquel minúsculo túnel. La pobre Catalina empezó a llorar de la emoción, volvía a su pasado, el que ahora sería su presente y futuro. Un quebranto a la derecha y otro a la izquierda y qué bonito era ver esas tablas de madera y ese terrazo a modo de escalera. [...]
(5.06.07)
Pasado aquel presente ya vivo en aquel futuro. Una vida de película entre películas. La ficción acompaña a la realidad. Me asomo desde la zona minúscula y veo que la película se rueda en el comedor de la parte amplia. Qué bonito ver el cine a través de dos láminas de cristal. Una situación como mínimo curiosa, ahora solo quedaría decidir qué hacer con ese cartón amontonado.[...](22.06.07)
Yo encuentro una decepción constante cuando veo que los decorados sí son de cartón piedra. No lo puedo remediar. A veces me quiero creer protagonista.
ResponEliminaBesos, también de Teo que le echa de menos.
¿Cómo hacer creíble todo eso? Qué sensación tan estraña y después poder hacer que parezca lo más real del mundo. Vivamos dentro de una película y que la realidad quede al margen, que podamos moldear todo lo que queramos y si dos películas se fusionan bien y si no pues también. Que si alguien quiere una peli de cine negro o de terror, que la tenga, pero que a mi no me meta dentro.
ResponEliminaRecuerdos a Teo también.
Ay, las pelis, cuánto daño hacen!
ResponEliminaPues a mí esta entrada me recuerda a una mudanza que hice hace un par de años. No sé porqué, será una "pensación" como otra cualquiera
Señorita Alegría. Me despido de usted los meses de verano. No sé que haré con mi enfermad sin sus consejos. Ni ´se lo que hará Teo. Creo que no sobreviviré. Me llevo al doctor Drexler y al doctor Deluxe. No así al Doctor Sidonie, que aún no tengo su receta, pero que debo reconocer que me han convencido con su propuesta scottimusical.
ResponEliminaIntenté mandarle un email, pero soy elemento non grato y me lo rechaza. Le enviaba de mi cosecha el guión que hará revitalizar el cine español, pero no pudo ser. Nos leemos en septiembre. Besos.
@Rafa Porcar,daño? Por qué daño? Si nos hacen elevarnos y ver las cosas desde otro punto de vista, o como mínimo aprender a hacerlo. No se trata de una pensación como otra cualquiera, creo que vas por buen camino.
ResponElimina@Señor de la Suburbia, que pena que se vaya así, de bote y pronto, avisando con escasos minutos de antelación. Le encontraré a faltar, y a Teo también of course, no concibo los días sin tener algunas palabras suyas dignas de paraíso o de huerta. Lo que más me inquieta es no saber cuando va a volver, y si no vuelve nunca más?, es que eso de volver en Septiembre me suena a infinito. Como va a poder pasar tantos meses sin tocar un ordenador... a caso se va a un retiro budista? Quizás lo debería hacer y resolvería todos su males, ni Woody Allen, ni Jorge Drexler ni Deluxe y aun menos Sidonie... la clave está en su interior. Buenas vacaciones, usted que puede.
Bueno, avisé con antelación, pero el email me jugó una mala pasada, señorita alegría. Y sí, sí tocaré ordenador (portatil) pero no tengo red por allí salvo que pille alguna por la zona (que todo puede ser). En fin, que me reitero. Gracias por sus palabras en Música es tres. Nos encontraremos escuchando el programa. Saludos.
ResponEliminaBuff... últimament a mi em dóna la sensació d'estar al Show de Truman. Si agafés una escala i comencés a pujar cap al cel, no m'estrnyaria gens que al tocar-lo, m'adonés que és el cartró d'un decorat. Seria d'allò més normal!!
ResponElimina@Señor de la Suburbia, no subestime a los vecinos con red wi-fi... en mi anterior piso podía escoger entre cuatro o cinco amables vecinos cada día... eso sí, ahora no tengo ni una a mi alcance. Pues nada, al final recibí lo que me envió, a ver si le puedo echar una ojeada. Felices vacaciones y que escriba mucho.
ResponElimina@Voliaina, doncs sí que les nostres vides estan darrerament un poc menejades. Qui sap, potser pujant per l'escala arribes a un altre lloc, o potser et caus de l'escala. Si us plau, Voliaina, ves amb compte.