Acepto la invitación de Bernard-Louis en Azabaches para transcribir el segundo párrafo de la página 139 de los libros que estoy leyendo.
Sobre mi mesita de noche se encuentra “El hombre del velocípedo”, de Uwe Timm, que me regalaron por Sant Jordi.
Dentro del bidet de mi cuarto de baño se encuentra “CAT, un anglés viatja per Catalunya per veure si existeix” (CAT, un inglés viaja por Cataluña para ver si existe) de Matthew Tree, uno de los dos libros que ragalé para Sant Jordi.
Bueno, me siento en el derecho de no prolongar esta cadena y no voy a nombrar a nadie para que continue. Eso sí, si a alguien le ha gustado la idea y quiere transcribir el segundo párrafo del la página 139 del libro o libros que está leyendo en su bloc, blog, flog, vlog... que lo haga y me deje un comentario para saber que lo ha hecho. Gracias y buena lectura.
Sobre mi mesita de noche se encuentra “El hombre del velocípedo”, de Uwe Timm, que me regalaron por Sant Jordi.
Otra característica distintiva de los velocipedistas apasionados son las piernas. Como consecuencia del continuo pedaleo se desarrollan los músculos de las pantorrillas. Pantorrillas gruesas, atiborradas, las denominadas pantorrillas de cicilista. Yo les pregunto, ¿podemos en serio ofrecer un vehículo semejante a nuestras señoras? Se alzó de puntillas y, con un timbre melifluo en la voz, gritó: No podemos permitirlo, ni vamos a permitirlo. Y, con un delicado movimiento de su mano hacia el lugar donde se sentaba Anna, continuó: Y la mujer tampoco tiene derecho a permitirlo, si tiene siempre presente la palabra del poeta, “eres como una flor”.
Dentro del bidet de mi cuarto de baño se encuentra “CAT, un anglés viatja per Catalunya per veure si existeix” (CAT, un inglés viaja por Cataluña para ver si existe) de Matthew Tree, uno de los dos libros que ragalé para Sant Jordi.
Surto del casc antic i dels seus carrers austers de color marró i vaig cap a la plaça Clarà, una relíquia del segle dinou, gris i senyorial, on llegeixo el diari. Hi ha un reportatge sobre un altre guàrdia civil, en aquest cas un agent del servei antidroga que fa uns mesos havia ingressat a la pressó, acusat de tràfic de droga; un cop alliberat va ser detingut al cap de poques hores, conduint més borratxo que un guanyador de la loteria; va tornar a ingressar a la mateixa pressó, on va coincidir amb un guàrdia urbà anomenat Antoni Guirado, un dels principals acusats pel segrest de la Maria Àngels Feliu, la investigació del qual l'havia dirigida el mateix guàrdia civil feia uns anys.
[Salgo del casco antiguo y de sus austeras calles de color marrón y voy hacia la plaza Clarà, una reliquia del siglo diecinueve, gris y señorial, donde leo el periódico. Hay un reportage sobre el otro guardia civil, en este caso se trata de un agente del servici antidroga que hace unos meses había ingresado en prisión, acusado de tráfico de drogas; cuando se le liberó lo detuvieron al cabo de pocas horas, conduciendo más borracho que un ganador de la lotería; volvió a ingresar en la misma prisión, donde coincidió con un guardia urbano llamado Antoni Guirado, uno de los principales acusados por el secuestro de Maria Àngels Feliu, la investigación del cual había sido dirigida por el mismo guardi civil hacía unos años.]
Bueno, me siento en el derecho de no prolongar esta cadena y no voy a nombrar a nadie para que continue. Eso sí, si a alguien le ha gustado la idea y quiere transcribir el segundo párrafo del la página 139 del libro o libros que está leyendo en su bloc, blog, flog, vlog... que lo haga y me deje un comentario para saber que lo ha hecho. Gracias y buena lectura.
Merci, maja alegría de la huerta.
ResponEliminaUn beso y disipa el verano como mejor puedas. Lo importante, ¡disipar! calor.
;-)
Bernardito, pues ahí estamos disipando el verano, el calor, y todo lo que haga falta. Besos y abrazos!
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