09 de juny 2011

Desintegrar en un acto


Con el riesgo de morir por pura indecisión tuvo que dar un paso al frente y dijo: presente! Atraer la mirada de los que le rodeaban y no dar opción a ningún equívoco, había llegado para quedarse. De todas maneras no podía huir de su sino pues con sus actos producía una desnaturalización de todo lo que le rodeaba. Durante los primeros años no ocurrió nada, con él, pues no era consciente de su desacertado don. Pero en el momento que vio la luz no cesó el doble maltrato, el de la vida desnaturalizada que creaba a tres pasos de personas a su alrededor y él suyo mismo por la consciencia de la gravedad que difundía a su alrededor. Quizás esta vez se tornase una debilidad provechosa para una sociedad saciada de tanta desidia. Formar parte de uno de los dos partidos políticos más votados del país podría servir para desintegrarlo y a su vez todo lo que se pudiera cocer en el parlamento.


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