Un hombre empuja penosamente una pesada carretilla. Hasta lo más alto lleva cajas de plástico repletas de quién sabe qué. A la mitad unas muletas atravesadas horizontalmente. El hombre no ve más allá, su vida es la carretilla, y a sus espaldas está creando una caravana de cuatro bicicletas.
Son cosas que pasan en una ciudad en la qué hoy, 27 de febrero, todos caminan en riadas desde los distintos puntos de la ciudad en la misma dirección. En escasos veinte minutos el estruendo removerá la ciudad, aunque esto no sirva para que sus pensamientos también sufran cambios.
Por favor, vayan a menos de 110.
ResponEliminaEso se soluciona pronto. Vente pa Extremadura, aquí nos movemos al revés que en el resto de España.
ResponElimina@Señor de la Suburbia, sobre todo eso... y que no fumen!
ResponElimina@Mordisquitos, hay tantos sitios a donde emigrar!